"Alaridos de animales extintos"
(Erosiones de libación hipodérmica)
“Sueños
e ilusiones”
(Animales
extintos)
Frágil
transcurres dormida;
Provocación
en lecho solitario,
Anhelo
de palmas vacías,
Es
el imposible de tu tacto;
Días
carentes de certidumbre,
Le
contemplan subir imparable;
Resplandor
de blanca piel,
Merodear
de tierna mirada,
Solo
cuando se lo permite;
Como
es usual, relojes no detienen,
Sombras
que renacen para distanciar;
Olvido
de cualquier palabra,
Desprovista
de tiempo o paciencia,
Es
el curso de su espera;
Dispuesta
a brebaje de alivio;
Enorme
en fugaz dependencia,
Conducida
en hábitos esquivos,
Labios
nunca serán suficientes;
Delicada
herida dulce,
Es
consumada su risa;
Resistir
de ningún modo valido,
Es
el correr de las horas,
Presencia
previa al extravió;
Arrastrado
por lo sensible,
Impulso
en recidiva se suele;
Fantasmagoría
en seductora figura,
Tempestad
jamás predecible,
Que
efímera sustrae toda calma;
Tiniebla
profunda de sol;
Demonio
en cuerpo ausente,
Deseo
de cadencia común,
Es
la tibieza de su silueta baldía;
Barranco
de emociones,
Cerrar
de parpados suyos;
Deleite
de borde mezquino,
Para
recordarme cuando caiga,
Todo
cuanto deje atrás.
“Libación
hipodérmica”
(Esencia
innominada)
Carente
de explicaciones,
Acude
ella sin motivos,
Presunción
de claridad lábil,
Que
evoca tibias cadencias,
En
relieves y ansiedades;
Deseo
de elemento furtivo,
Es
cuanto denota su voz suave,
Alivio
de narcótica medicina,
Que
despoja tal como devuelve,
Oscuridad
de desolación baldía,
Ausencia
de sus labios esquivos;
Expresa
la voluntad de su pecho,
Revelaciones
inconclusas,
Rigurosas
fronteras,
Que
demarcan el límite frágil,
De
caricias y agresiones,
Ardid
de violenta pasión;
Vacila
en pálpitos sensibles,
Señales
que atenúa desentendida,
Valida
de volubles recuerdos,
Versiones
todas donde el corazón,
Jamás
reconoce su desnudez;
Desprovisto
de palabras difíciles,
Resplandor
espontaneo es el silencio,
Que
emplea al articular simple,
Detalles
de fugaz belleza,
Calidez
de susurrado aliento,
Que
abriga su cuerpo vulnerable;
Venganza
de naturaleza insomne,
Es
la provocación de sus besos,
Sobresalto
de vigor electrizante,
Que
repentino acomete contuso,
Al
capricho inexorable de su sexo;
Carente
de explicaciones,
Desaparece
ahora desprendida,
Tiniebla
es la huella de su afecto,
Rastro
de pensamientos cercenados,
Que
tornan anhelos en angustia,
Necesidad
de nueva manifestación.
Fernando
García M.
*Datos de pista:
Tema: Alaridos de animales extintos.
Autor/Interprete: Fernando Garcia M.