“Ofrenda emotiva”

(Tema quemarropa)

Conservaras la última esperanza,

Y halando el gatillo sutilmente,

Flotando en delgada niebla,

Se apagara aquel dolor;

Los días sabrán de ti,

Mirares desentendidos,

Dirán fuiste indomable,

Distante en desatino cauto;

Preservaras la última bala,

Y sonriendo como solías,

Asumiré aquella derrota,

Cedido al desvanecer de la suerte;

Nutrido por tal tristeza,

Olvidaras reproches y castigos,

Siendo perpetua la noche,

Sombras aliviaran todo sufrir;

Ensordecedor impacto,

El ruido cerrando los ojos,

Instrumento es del silencio,

Borrando rostros y lugares;

Exaltación desgarradora,

El sol que saldrá para ellos,

Oscuridad es de sueño,

Inalcanzable a cualquier palabra;

Conservaras la última esperanza,

Y agotando fuerzas restantes,

Avivare la llama ulterior,

Hasta hacer del alma cenizas;

Ocasos rodando carmesíes,

De tu nombre harán sustantivo,

Que imposible sea articular,

Con decepción o desengaño;

Preservaras la última bala,

Y emprendiendo vuelo definitivo,

Enorme el plumaje de tus alas,

Abrigara libertad sublime;

Consumido por aquella inocencia,

Reconocerás el mundo debilitado,

Cual pesadilla evaporada,

En armonía de despertar eterno;

Destello de resplandor absoluto,

Tomare sus manos aún tibias,

Desaparecido tornare a su pecho,

En versos de ilusión y alegría;

Interrupción de súbito estallido,

Enlentecidos hasta la quietud,

Corazones de pólvora y sangre,

Han de unirnos por siempre.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Tema quemarropa.
Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

“Tiniebla y epifanía”

(Fisión espectral)

*Sombra en deleite,

Paseando desnuda,

Posas toda magia,

En palabras incompletas;

Suaves grilletes,

Son tibios suspiros,

Desatando el alma cautiva,

Frágil en palmas y anhelos:

Resguardo de piel callada,

Siempre viviendo al margen,

Cual hombre he curvado mi silueta,

Torciendo tobillos al abismo,

Danzando en la basura de los días,

Hasta ser ángel inmaculado;

*Aura de dulce silencio,

Próxima y distante,

Asumes todo misterio,

Disipada en ocultos relieves;

Sutiles hogueras,

En comisuras y labios,

Consumen temores y deseos,

Redimiendo sedientas agonías;

Conmoción de latido ausente,

Colección de apetitos peculiares,

Túneles son mis ojos enrojecidos,

Dispuestos a placeres y destrucción;

Acantilados mis oídos son voces,

Ecos de turbación profunda;

*Fascinación peregrina,

Oscilando desinhibida,

Conduces toda manifestación,

En colisiones de contornos y respiros;

Efímeras estancias,

De infinita armonía,

Sacuden cuerpos y tizones,

Susurrando suplicas y negativas;

Primor de duda inconsolable,

Confección de recelos entrañables,

Resplandor es mi ilusión no derrotada,

Desmedida en cumbres de alas rotas;

Mis manos inútiles y vacías,

Apresan recuerdos de lunas despiertas;

*Delicado tormento,

Jadeos de salada estirpe,

Impregnas sin reparo,

En cuanto tomas dominante;

Cálidas sugilaciones,

Resultan verbos y adjetivos,

Revelan dorsos desiguales,

Exaltaciones exentas de tiempo;

Provocación de aroma inflamable,

Nunca aventurado totalmente,

Fácil he padecido este cadáver,

Libre de complicaciones futuras,

Atesorando horas difuminadas,

En adorar vanas cavilaciones;

Retirada en quietud inmaterial,

Descubre a cada momento,

Detalles que creí extraviados,

Obligándome a aquellas formas;

Universal y eterna,

Pasea el desenfreno ido,

Ansiedad que regresa certera;

Conoce, esmerado y correcto,

Jamás he poseído criterio,

Que no sea modificable.

*Descansar también implica,

Rigor de autoridad moral;

Ir con tiento, de a poco,

Cuando se salga.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Fisión espectral 4.
Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

"Alaridos de animales extintos"

(Erosiones de libación hipodérmica)

“Sueños e ilusiones”

(Animales extintos)

Silenciosa indefensión,

Frágil transcurres dormida;

Provocación en lecho solitario,

Anhelo de palmas vacías,

Es el imposible de tu tacto;

Días carentes de certidumbre,

Le contemplan subir imparable;

Resplandor de blanca piel,

Merodear de tierna mirada,

Solo cuando se lo permite;

Como es usual, relojes no detienen,

Sombras que renacen para distanciar;

Olvido de cualquier palabra,

Desprovista de tiempo o paciencia,

Es el curso de su espera;

Lunas después sabrá volver,

Dispuesta a brebaje de alivio;

Enorme en fugaz dependencia,

Conducida en hábitos esquivos,

Labios nunca serán suficientes;

Delicada herida dulce,

Es consumada su risa;

Resistir de ningún modo valido,

Es el correr de las horas,

Presencia previa al extravió;

Arrastrado por lo sensible,

Impulso en recidiva se suele;

Fantasmagoría en seductora figura,

Tempestad jamás predecible,

Que efímera sustrae toda calma;

Huellas en sabanas ajadas,

Tiniebla profunda de sol;

Demonio en cuerpo ausente,

Deseo de cadencia común,

Es la tibieza de su silueta baldía;

Barranco de emociones,

Cerrar de parpados suyos;

Deleite de borde mezquino,

Para recordarme cuando caiga,

Todo cuanto deje atrás.

“Libación hipodérmica”

(Esencia innominada)

Carente de explicaciones,

Acude ella sin motivos,

Sigilo de amenaza en risa extinta,

Presunción de claridad lábil,

Que evoca tibias cadencias,

En relieves y ansiedades;

Deseo de elemento furtivo,

Es cuanto denota su voz suave,

Alivio de narcótica medicina,

Que despoja tal como devuelve,

Oscuridad de desolación baldía,

Ausencia de sus labios esquivos;

Expresa la voluntad de su pecho,

Revelaciones inconclusas,

Rigurosas fronteras,

Que demarcan el límite frágil,

De caricias y agresiones,

Ardid de violenta pasión;

Resuelta nunca a cabalidad,

Vacila en pálpitos sensibles,

Señales que atenúa desentendida,

Valida de volubles recuerdos,

Versiones todas donde el corazón,

Jamás reconoce su desnudez;

Desprovisto de palabras difíciles,

Resplandor espontaneo es el silencio,

Que emplea al articular simple,

Detalles de fugaz belleza,

Calidez de susurrado aliento,

Que abriga su cuerpo vulnerable;

Venganza de naturaleza insomne,

Es la provocación de sus besos,

Sobresalto de vigor electrizante,

Que repentino acomete contuso,

Sometiendo espíritu y carne,

Al capricho inexorable de su sexo;

Carente de explicaciones,

Desaparece ahora desprendida,

Tiniebla es la huella de su afecto,

Rastro de pensamientos cercenados,

Que tornan anhelos en angustia,

Necesidad de nueva manifestación.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Alaridos de animales extintos.

Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

"Salida en reseña"

(Vocales y obstáculos)

“Alusión y obstáculo”

(Ref. 11-18)

Harto de cualquier olvido,

Emprendo tan última contienda;

Entiendo se es siempre recuerdo,

Acechado por almanaques y manecillas,

Transiciones inútiles,

Que terminaran en lo mismo;

Fallido en condición palpable,

Desdigo toda afirmación absoluta,

Que sobre cosa propia,

En tinta haya esbozado;

Nunca supe negarme,

Al deleite de lo inexpresable,

Tampoco supe decir no,

Al sonido de ociosas licencias;

Cansado de lo inalcanzable,

He de atreverme a lo seguro,

Al insospechado certero,

A la normalidad socarrona,

De la soga que abrasa el cuello,

En palabras que salen del alma,

Mostrando verdad y belleza,

Espasmos de miembros y esfínteres;

Pretendo la libertad del corazón,

Alivio de aquel ardor,

Que consume toda espera,

Prensado a pensamientos y motivos;

Vacilaciones del espíritu que evita,

Expuesto en miradas y tegumentos;

Adquiere nostálgica carne,

Aquella reflexión vacía,

Nombres y espectros,

Saludan lunas inflamadas;

Sus voces huyendo distantes,

Ante el silencio trasgresor,

Consuelan la timidez de este deseo,

Harto de cualquier olvido;

Sordo apetito de refugio,

Ilusión que en deterioro evidente,

Comprende es efímero persistir;

Calidad de artefacto roto,

Imaginación descompuesta,

Es la fantasía de aquel brío;

Impulso de total entrega,

Contradicción que al pecho divide,

Entre odiar o ser lastimado;

Ejecución también fracasada,

Sollozo de latidos irregulares,

Sublimando ausencias insomnes;

*Juventud que escapas resuelta,

Conduce tu ulterior brillo,

A ese día victorioso,

Exento de sangre y sacrificio.

“Ilusión y obstáculo”

(Salida en reseña)

Acaso te consideras a salvo,
Acaso, exento de cualquier peligro;
Es la vida un juego perdido,
Una partida resuelta luego,
A la estrechez del corazón;

Todo esta mal y todo esta bien,
Imposible es añadir al mundo,
Traza mayor de justicia y caridad;
Herida exuberante es la existencia,
Desafió carente de recompensa,
Extravió de tiempo y respiros;

Suplicio final antes de la nada,
Fascinación vacía que callada,
Domina la manera nunca expuesta,
Donde esclava de sentidos y emociones,
Clama por libertad el alma inquieta,
Aquejada de necia esperanza;

No tengo más que ofrecer,
Que versos ausentes de alegría;
No tengo más que perder,
Que tinta desprovista de ánimo;

Deberías, esquizotípico amigo,
Agradecer ninguna indulgencia,
Más que aquella paridad limítrofe,
Que dedicada a nadie sin duda,
Escapa a cualquier presencia,
Elevando el espíritu afligido,
Sobre la carne que ciega padece.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Salida en reseña.

Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

"De nada/Esquizotípico"

(A nadie, paridad limítrofe)

“De nada”

(Paridad limítrofe)

Soledad que nunca te alejas,

Superior entre tus virtudes,

Es la culpa insistente;

Sobrecogedora zozobra,

Que somete este cuerpo,

De calidez desdeñable;

Rostro irreconocible expresa,

El alma que guardo dolido,

Bajo la piel siempre inquieta,

Que intenta lo no perdido,

En encantos de dulces quimeras,

Espectros carentes de voz;

Soledad, compañía de largas horas,

Es tu sombra mi reflejo temible,

Consecuencia de aquellos deslices,

Que culminaron en días azules,

En atardeceres resignados,

Al desvanecer de la vida;

Desolación jamás derrotada,

Al mirar tus ojos vacíos,

Colmados de la nada toda,

Retornan frases erosionadas,

Palabras que desdicen

Cualquier presente;

Insalvables indicios,

Del olvido que reaparece,

Para destruir y prevalecer;

Expresa irreconocible rostro,

El espíritu que antes enardecido,

Entre desvelos y silencios,

Presa es de aquella calma,

Nacida del sopor sublime,

Que aviva en horror

La desesperanza.

“Esquizotípico”

(A nadie)

Escojo perder antes que derrotarte,

Felicidad se suele la victoria,

Y en tal, tristeza más no deseo,

Que afligida clame mi nombre;

Malbaratado recordatorio,

De cuanto debe evitarse;

Huir es todo lo que sé,

Al elegir entre herir o ser herido,

No obstante el mundo se complace,

En llevarme cual me ha traído;

Razón de llanto indefendible,

Sumario de rostros y olvido;

Si es el destino un camino,

Hermoso es aquel precipicio,

Desfiladero de emociones sin brillo,

Galera de incertidumbre y vacío;

Refugio del corazón compungido,

Experto en desengaños y vicios;

Prefiero la soledad a abandonarte,

Liberación implica toda partida,

Y en ello miradas más no ansío,

Cargadas de frustración y pesares;

Miserable calma de afecto,

Nacido de rutinaria costumbre;

Morir es todo lo que puede,

La vida que agoto abstraído,

Resucitado por el tiempo que insiste,

En ilusiones de amor encendido;

Impaciencia que siempre insomne,

Desánimo es de lunas y latidos;

Si gustase cuerpos turgentes,

Visitaría morgues y anfiteatros;

Sin embargo anhela el alma,

Aquella compasión en artificio,

Ternura que sabe atormentarle,

Luego de extinto el encanto;

Voces retornan desatadas,

Colmadas en destierro y hastió,

Armadas con aquellas palabras,

Que explican como el silencio,

Signo es de condición malsana,

Singular odio a los espejos.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Paridad Limítrofe.

Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

“El triunfo de las horas”

(Seducción ultima)

Vida que marchas suelta,

Cambiante e inmaterial,

Voluntad de incertidumbre,

Son los días que infinitos,

Escapan en soles profanos;

Sombras de nada en concreto,

Silabas que regresan profundas,

Siempre en nocturnos silencios;

Mascara dispuesta en espejo,

Es la ilusión de propia consciencia,

Energía que subatómica agita,

Deshabitados pensamientos;

Distorsión sumada al reflejo,

De este rostro subliminal,

Mística identidad que recrea,

Pueriles pasiones desiertas;

Luz de indecible origen,

Destello que en los corazones,

Logras dulzura y padecimiento;

Manecillas desiguales,

Consumen sin cuidado las formas,

Confinado el espíritu sensible,

Entre anhelos inflamables,

Lamenta toda distancia;

Precipitados e imperceptibles,

Recuerdos acuden diversos,

Desafiando el resplandor difuso,

De astros nunca constantes;

Naturaleza de firmamento,

Abriga el soñar cautivo,

Que frágil intenta insomne,

Aquel delirio inalcanzable;

Vida que suelta marchas,

Inmaterial y cambiante,

Velocidad etérea es el afán,

Que sacude tu galopar infame;

Desvanecer perpetuo en inevitable,

Que siendo indolente presteza,

Malogra vigor y belleza,

Sometiendo presunción y vanidad;

Abunda el alma en desvelos,

Sujeta a tal vacilación cruel,

Posibilidad fortuita de lo inerte,

Obligación de retorno súbito,

A esa libertad jamás suficiente;

Absolución de afectos y razones,

Despedida de espinas y pétalos,

Conquistado el triunfo de las horas.

Fernando García M.

*Datos de pista:

Tema: Seducción ultima (Low fi).

Autor/Interprete: Fernando Garcia M.

“Entre navajas y mirares”

(Por cuanto sea sensitivo)

Aquellos ojos mudos,

Conspirando entre bocanadas,

Revelan lo que imagino callas,

Si sospechas son bienvenida,

Al nombrarte cosa sensible;

Las palabras que no dices,

Son lectura certera,

Procurando siempre por fuera,

Aquella fuerza que redime,

Toda ilusión de descifrarte;

Delator es el ceño,

De parpados que titilan,

De cejas que trepan alto,

Cuestionando desafiantes,

Razones también imposibles;

Aroma de desaire,

Es el desconcierto frió,

Argumentos que suprimes,

Abstraída en súbitos silencios,

Entregada a lo interpretable;

Mudos aquellos ojos,

Velados entre oscuros cabellos,

Exhiben aquel misterio triste,

Certeza de centenar de rostros,

A la soledad nunca suficientes;

Las silabas que escondes,

Escapando por gestos y pupilas,

Explican mejor sin rodeos,

Aquello que en latidos,

Esperas no sea descubierto;

Sabe aquel corazón rebelde,

De desamor y desconsuelo,

De provocación y sentimiento,

Sabe tanto luego, que olvida

Como ocultarse;

Arquear sutil de comisuras,

En fuga jamás predecible,

Es la voz de sus labios,

Acechantes y evadidos,

Espejismo de humo y sandía.

*No obstante, asumo el reto,

Galante y desentendido;

Tripulante de un barco ebrio,

Que ignorando donde zarpo,

Entiende de naufragios y suspiros;

Saludando el agua hasta el cuello,

Entre navajas y mirares.

Fernando García M.

*Datos de pista:
Tema: Entre navajas y mirares.

Autor/Interprete: Fernando Garcia M.