“Involución
rítmica 12”
“Involución
rítmica 12”
Listado
de poemas
1.
Temporales
y resacas. -00:50
2.
La
valija del difunto. -02:16
3.
Entre
rieles de fuego. -03:44
4.
Lo
realmente importante. -06:08
5.
Lideres. -06:59
6.
Judas
luego del vía crucis. -07:58
7.
Mancebo
33 grados. -09:23
8.
Imprenta
Molecular. -10:50
9.
Manzana
para Eva. -13:03
10. Mí, su. -14:57
11. Postal navideña. -16:54
12.
Naturaleza
inmunda. -18:08
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*Subtitulo:
Eventos
factibles nada prueban,
Más,
si son invocaciones sentidas,
De
embriagado estigma errante,
Cuerdo
nómada crucificado.
*Coraza
es este esqueleto,
Que
entero exige lluvia;
Truenos
evitar deben,
El
aparentar escueto,
De
los astros nocturnos;
Versos
regresan alucinados,
De
entre los sueños corrientes,
De
la ciudad que dormida,
Reposa
en su mano insomne;
*Demando
hálito de clima,
Solida
tormenta que humedezca,
Las
comas de sus palabras devotas;
Encuentro
de calmo fluir,
Se
deben las lágrimas,
Que
al no derramarse,
Ahogan
el alma;
Escuchas
refutan acalorados,
Entre
la brisa fría y seca;
Exhiben
en improperios desafinados,
Las
bondades que espirituales simboliza,
Una
súbita precipitación fratricida;
*Padre
que ojeras de estrellas,
Ostentas
por eternidad despierta;
Concede
coloque en sus labios,
"La
valija del difunto"
(Adiós
de los conocidos)
Donde
oculta duerme,
La
razón de los desvelos,
Donde
reposa la culpa,
De
la pasión y los celos;
Añoranzas
esperanzadas,
De
vidas que cansados disimularon,
Olvidan
pasivos los muertos;
*Secreto
ídolo,
Talismán
reverberado;
A
quien se pide aquello,
Es
solo el solicitarlo;
Placida
sensación,
De
sedación verdadera,
Que
toma lejos las agonías,
Para
aguardar un parpadeo,
Y
esparcirlas eternamente;
Denominación
de extrañes,
Acontecimientos
replegados,
En
recuerdos sencillos,
Recrean
la secuencia desnuda;
Indicios
últimos de pertenecía,
En
tono de cortina final,
Aplicados
son con sutil pincelada,
Por
el destino, azar de cuenta propia;
Micrometrajes
mudos se exhiben,
Entre
perturbadores ruidos,
Hasta
ocultarse bajo la tierra,
En
atuendos de voluntad ajena;
Permaneciendo
allí, espantado,
Llamado
al alivio de la ausencia;
Ojeras
que goteando,
Fabrican
rostros perpetuos.
-¡Preocupaciones!.-
“Entre
rieles de fuego”
(Parlantes
entonan desolación)
Miradas
de miedo y dolor,
El
mundo es jaula florida,
Que
entre suaves barrotes,
Cautiva
multicolor;
Vidas
intensas y opacas,
Cambiantes
como el clima,
Marchitanse
en tornasol,
Próximas
a la cima sublime,
Materializando malheridas,
La
falsedad del amor;
Grabando
insignemente,
La
máxima que incólume inquiere,
Impredecible
es constante,
En
el hombre voluble;
Traslada
al reflexivo líder,
Que
exponiéndose se esconde,
En
masivos eventos públicos,
Pues
distante les percibe,
Cual
siervos de corazón frio;
Consignaciones
estelares,
Que
realizadas en su nombre,
Bendicen
con desdén,
Al
denigrar con lastima;
Fama
que acallando el hambre,
Permite
la fatiga siga su curso,
Invulnerable
al despertar truculento,
De
los sentidos adormecidos;
Condena
de alentar creaciones,
Espectral en días corrientes,
En noches infinitas,
De sombríos matices;
Exento de comentarios,
Espectral en días corrientes,
En noches infinitas,
De sombríos matices;
Exento de comentarios,
O
compañía sincera,
Atascado
en paredes y clavos,
De
oficinas estatales,
Planteles
de elite,
Y
concurridas fondas
Tropicales;
Éxito
y riqueza,
Es
tristeza y vacío,
Cuando
nada puede el oro,
Frente
a la lápida solemne;
Cruz
de colección,
Clasificado
y respetable,
Es
su exilio profundo;
Meditar
de razones interrumpidas,
Agresión
de silencio súbito,
Retrato
duplicado
De
tantas maneras;
Carnaza
de demonios,
En
mofa decorativa.
“Lo
realmente importante”
(Todos
en comunión)
Brillante
es más que la plata,
Valioso
más que el oro,
Sin
prejuicios ni decoro;
Adictivo
es más que la nicotina,
Puro
cual lacónico polvo,
Extrae
penas de notables heridas,
Sin
que falte o haga estorbo;
Amor
de misericordia,
Es
el toque de su tacto,
Paciente
y cauteloso,
Incondicional
y abnegado;
Dependencia
de gozo,
Repulsión
de abismo,
Afecto
que les une,
Siendo
seguidores
De
Cristo.
“Lideres”
(E
imperios)
Bajar
lo mismo no es que caer,
Y
esto lo conocen los ángeles,
Tanto
como los demonios;
En
premeditados descensos,
Emisario
se suele impoluto,
Encarnar
epifanías manifiestas,
De
mayestática alcurnia;
En
accidentados declives,
Afanoso
se busca consuelo,
En
vidas pecadoras colmadas
Que
fueron vanas carcajadas;
No
es lo mismo caer que bajar,
Diversas
revelaciones en imágenes,
Desconocen
sin certeza completa,
El
carácter encumbrado,
De
su llegada doble.
“Judas
luego del vía crucis”
*Subtitulo:
Despidió
afectuosamente,
Al
duplo descendido,
Augurando
larga tertulia,
Con
aquel inicial.
Sé
te preguntaras como es posible,
Que
haya llegado primero;
No
obstante, si supieses
Cuánto
hemos hablado,
Antes
de arribar este instante,
Te
desconcertaría toda respuesta;
Las
marcas en el cuello,
Junto
con la desviación,
De
esta mirada de ojos salidos,
Es
solo el peso ajustado,
De
aquellas monedas graves,
Que
acordadas, al poseer
No
quise, por ser tuyas;
Dicho
en mejor manera,
Por
tu causa sagrada;
Recado
mas no abrigo,
Que
a tu pompa corresponda;
Les
dejare en la total confidencia,
Propia
de semejante encuentro,
No
sin antes expresaros;
Besaría
esas mejillas inocentes,
Las
veces que requerido fuese,
Solo
por atestiguar las maravillas,
Que
previo a vuestra venida,
Sin
enigmas has narrado.
“Mancebo
33 grados”
(Sin
larvas, amplia creación para intentarlo)
Símbolo
que articulado,
Manifiesta
amor;
Augurio
de ilusión esencial,
Reconforta
el decaído espíritu;
Cuando
vuelva del silencio,
Sobre
la muerte será el deseo,
Aquello
que no tenga fin;
Anhelo
de interna sensibilidad,
Que
vistiendo lo inmóvil,
Ocultas
la energía mística,
Que
es la vida aislada,
Sin
justificaciones de pálpitos,
O
sesgos de belleza;
Favorece
la esperanza
Traiga
sin demora nuevamente,
El
aletear de su carcajada sencilla,
Ajena
a los errores del aspecto;
Colmada
de esa alegría,
Que
consuela las almas en reposo;
Silabas
dulces neutralizan ojos,
En
vanidades y artilugios,
Descolgándose
pies de pasos,
Compresión
de única luna,
Se
superpone a múltiples noches;
Tolerancia
de excepción,
Continúa
sin certeza de límite,
Frente
al rigor velado,
Que
entre cofres y orlas,
Inevitable
separa los corazones.
“Imprenta
molecular”
(Ídolos
y franquicias)
Ostentando
sobre la piel,
La
marca de Jesús crucificado,
Cuerpo
son para él,
Manifestación
que toma,
Voluntad
de carne;
-En el protestantismo actual,
Su imagen pos-resurrecta-
*Tesoro
de barro,
Preferencia
de mi poder,
Exento
de desamparo,
Cinética
adquiere mi verbo,
En
la vitalidad de tus músculos;
Grietas
acentuadas,
Acusa
el uso y el tiempo,
No
obstante, bello es el fuego,
Que
agita la hoguera ansioso,
De
dorar escogidas vasijas,
En
la misericordia de mi nombre;
Labios
suyos mezclando,
Bocados
de palabra fluida,
Disponiendo
de mi semilla,
En
diversidad de lenguas,
Cual
manantial cristalino;
Siervos
de fresco manjar,
El
sentir de mí llamado,
Promocionando
la verdad,
De
mi mensaje salvador;
Acatando
con fiel escucha,
Semejantes
en cercanía y virtud,
Cual
recipientes enaltecidos,
De
comunión y armonía,
Atestados
de dicha y testimonio,
En
la certidumbre de mi majestad;
Posesas
vajillas de tierra cocida,
Inventariadas
son delicadamente;
Según
integridad de forma,
Utilidad
les asigna disímil,
Reservando
a aquellas fortalecidas,
El
transmitir su revelación;
Versículos
y epístolas,
Precioso líquido diáfano,
Que
enturbiada la transparencia,
Por
mundanas tribulaciones,
Fermentar también sabe,
El espíritu de sus silabas;
*Atrás
les guardare,
Esperando
la indicada cosecha,
Restituidas
en propicio instante,
Contendrán
mi infalible promesa,
Ofrenda
de obediente gratitud;
-¡Intercesión!-
Siempre
llega la hora,
En
paciente añoranza.
“Manzana
para Eva”
(Demanda
de versos)
*En
el mágico jardín,
De
su sonrisa en mis huellas,
Anido
en verdes ánimas;
Pétalos
sin tallos,
De
frondosos mirares;
Grilletes
de difusos alcances,
Temor
no son para el espíritu,
Que
divinidad e intriga,
Contempla
en lívido rostro;
Taxonomía
de pecaminoso fruto,
Ardor
de pasional afecto;
Desenfrenada
euforia,
Que
a la tristeza sustituyes,
Sendero
de ansiosas sombras,
Entre
hojas hasta ella se abre;
Seguro, permanente y despojado,
Es
el ánimo que eleva su piel,
Fuera
de relieves y tactos,
A
la velocidad de la sangre;
Satisfacción
de carnaval,
Homenaje
humano,
Impulso
inmaterial;
Fundición
de portadores,
Que
en afirmación se erigen,
Proclamando
inevitable destino;
Cráteres
de plagas y hombres,
Que
cuidado advierten furiosos,
En
túneles de miedo y rencor;
Estira
el olfato,
Mentolada
aroma,
Es
el rozar suave,
De
sus palabras en llanto;
Próximas
sus manos,
Junta
palma con palma,
Repudiando
ese sabor,
Que
venideros sabrán morder,
Entre
ruinas y enfermedad,
Hasta
el urgir mi nombre;
En
tan elocuente modo,
El
origen de sus martirios,
En
aquel edén germinal;
Para
él pesadamente encarnado,
En
las pupilas de Magna.
“Mí,
su”
(Comunión
de santo espíritu)
Deleite
en devoción,
Es
el ritmo que de relámpagos,
Relacionando
va en los cielos,
El
origen de su mal;
Opacas
nubes,
De
tardes oscuras,
Por
arrugados minutos,
A
la soledad, al desespero,
Al
porvenir falto de luz;
Salvación
de siete mares,
En
los ojos de las hijas del águila,
Con
campanas y cascabeles,
Describe
su dulce demencia;
Maravillosa
ocasión es,
El
ismo de sus recuerdos,
Que
contagioso casual posee,
Bríos
de aires y relojes;
*Rayo
de sol íngrimo,
Que
caído, casi partes;
Revela
donde oculta el día,
Bolsas
variadas,
De
convicciones plásticas,
En
inhibición residual,
Sellan
herméticas la cordura;
De
entre todas las llaves,
Tacita
su entrada sin dientes,
La
puerta abre a lo trastocado;
Asunto
que podría decirse,
Cuando
entre refulgentes sirenas,
Admitir
se debe insensato,
Equipaje
es la tardanza,
Del
ave que en travesía,
Huye
a su nidal de plegarias;
-En el calvario de Magna-
Claustro
en sepulcro,
De
migajas y centavos,
De
maderos y mártires;
Paz
efímera de hombre.
“Postal
navideña”
(Laminada
estampa)
Si habitante se es de la calle,
Entre traiciones y desengaños,
Necesidad no existe alguna,
De aparentar sobria conducta,
Sumido en díscola euforia;
Prejuicio
de mínima proximidad,
Es
el abuso de aquellos elementos,
Frecuentes
en utensilios de avenida;
*Absurdo
en demasía,
Mendigos
y desechables,
Exhiben
ahora, mejor moral,
Que
individuos de buen nombre;
¿Qué
sigue, rameras ostentando hímenes?
Confusión
y calamidad,
Engendra
el olvido cómplice,
De
valores que poco infundidos,
Positiva
manifestación intentan,
En
deteriorados eslabones,
De
vicio y miseria;
Luego,
hizo un silencio,
Conmemoración popular,
Era su desaliento festivo.
"Naturaleza
inmunda"
(Socorro
a la ilusión; espectáculo de tabla)
Baile
de poca monta,
Velando
rocas altares,
Ennegrece
la casa;
Sobreocupado
el placer,
Regurgita
huellas,
En
escuchas y antojos;
De
las almas son los actos,
Asegurar
se debe un espacio,
Cómodo,
suficiente y reclinable,
Para
que la curiosidad renuente,
En
mueble de ávido exceso,
Restaure
toda contemplación;
Esplendidas
coronas fundidas,
De
arrepentimiento y recidiva,
Coloridas
en agrupados cabellos,
Portan
los nombres desiguales,
Que
precisan subdermicas intenciones,
Al
indagar por agrado y dolor,
Exhortando
candor y hastío;
Danzando
en desdeñable ritmo,
Enlentecido
y voluntarioso,
Entre
impredecibles compases,
Huérfano
se agita el mundo;
Exclusivas
son sus causas,
Oscilantes
sus efectos,
Final
desconocido lleva,
Su
carrera que inicio admite,
Parcializado
en diversas versiones;
Menguado
y milenario,
Derrotado
e imbatible,
Sin
reparo de tiempo,
Estremecer
aún logra su paso,
Razones
y consciencias;
Fatigada
en su honra,
Imperturbable
prosigue,
Ungida
en el eje inflexible,
De
aquel tubo cromado;
Ondeando
el custodio diseño,
Que
supra púbico engalana,
Tan
violáceo triangulo,
Que
cruzado en comisuras,
Estático
simboliza Roma;
Detallada
su anatomía,
En
mirada primera,
Encantadora
duro
Para
él, todas las veces.
Fernando
García M.
*Datos de pista:
Tema: Involución rítmica 12.
Áutor/Interprete: Fernando Garcia M.