“Involución
rítmica 11”
Listado
de poemas
1. Como reconoció el modo. -00:50
2.
Cucarrón
de estigma. -04:44
3.
Avivamiento
con raíces por cielorrasos. -06:38
4.
Cupo
de inmundicia. -08:34
5.
De
Cristo a Cristo. -10:09
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(Antes
le habían olvidado)
Cuando
muera,
La
ciudad no me recordara,
Ni
por un instante,
Con
misericordia;
Nombraran
a otros,
Como
solían nombrarme,
Y
los antros de licor e inmunicé,
Y
los innecesarios artículos varios,
Cambiaran
tan solo en aspecto,
Manteniendo
volubles su funcionalidad;
Las
gentes se transformaran,
Hasta
parecer exageradamente,
En
la intimidad de sus entornos;
Seré
en aquellos que temerosos,
Persistan
solos y perdidos,
Abundados
de cansancio,
Martirizados
en odios y excesos;
*¡Alimentación
negativa,
Sustracción
nutricional!
El
hambre muerte
Ha
encontrado,
Junto
al amante apetito,
Que
infiel le fue con la cena,
Que
allí humilde se ofrece;
Odiseas
astrales cantan,
Los alarmantes ladridos,
Premurosos
transeúntes inconexos,
Con
razones de caninos encierros,
Dan
pasos subvalorados,
En
la pugna fluctuante,
Entre
ataque y autoridad;
Suicida
el estómago,
Atormentado
en fatalidad,
Conforme
en dislexia sexual,
Cálidamente
suele refugiarse,
En
miradas venosas;
Romances
rancios,
Donde
aperitivos
Órganos fosforados,
Emitiendo
melodías,
Elevadas
en llama;
En
tinturas azules,
Sobre
papeles, bloques
Y
expulsiones,
De
comas dedicadas
Al
condimento,
De
tan maternal mendrugo;
Sumisos,
que hijos
Honrosos
tienen,
Por
piedras petrificadas;
Estorbos
que regando,
Van
calcificada semilla,
Para
convertirse en adoradores,
De
inhalar sedimento;
Servilleta
nupcial,
De
congregante prometida,
Instrumentales
densos,
Argumentos
recaudan,
Para
inducir el fallecer,
De
manera dinámica
Y
poco fácil;
Para
sacudir la mesa,
Donde
platillos
De
libertad y vida,
Perecederos
son tocados,
Por
inmerecidas palmas;
*Correr se
debe la silla,
Ofreciéndola
al usuario,
A
la vez que se enumeran,
Anhelos
y desesperaciones,
Colocando
títulos irritantes,
Estimulando
el florecimiento,
De
adjetivos y direcciones;
Relacionando,
con estricto
Apego
a la época,
Aquellos
espacios públicos,
Donde
se podría mendigar,
Al
padecer la peor quiebra;
Al
penar eternamente,
Cuando
de difuntos,
Curiosos
entre pleitos,
Sobre
rumores y mitos,
Acierten en encontrarlos,
Espectrales
en descritas ubicaciones;
Luna
de siempre gitana,
Por
tocador y espejo,
Vana
contemplas atenta,
El
retorno de tu aspecto,
En
pecados de amores solemnes;
En
la belleza de esa fealdad,
Que
infatigable se perdona,
Los
terribles errores,
De
su destino inmóvil,
Ajeno
a la decisión
De
sus decepciones;
A
la entrada vejez,
De
su rostro plateado,
Al
soportar décadas,
Descuartizadas
en eras;
Inestables
estados,
Indaga
insatisfecha a los hombres,
Para
condenar o absolver,
En
la armonía de su fascinación,
Para
recordarles que aún están;
Insomnes
manos,
Llevadas
por pies errantes,
Implorando
por almas,
Que
aún no pertenecen;
Esas
que al ausentarse,
Consumidas
por la inercia,
En
caso de volver nuevamente,
La
ciudad ha de olvidar,
Al
igual que a todos.
“Cucarrón
de estigma”
(Manera
poderosa)
Antes
de la hoguera,
Humildad
siguió la altivez,
Al
reincidir en el ciclo,
Que
intentar suele,
Acomodo
a la voluntad
De
mis ideas;
El
sufrimiento,
Hace
de la restauración,
Un
desagradable proceso;
Minucioso
en sangre de insecto,
Que
entre barro nuevo,
Concede
vida a lo viejo;
Elemento
de esta anatomía,
Que
sana sin demora,
Habla
pues al alfarero,
Indaga
por aquellos actos,
Reconociendo
culpas;
Salta
dispuesto a la candela,
Convencido
de cerrar ranuras,
Quebrando
la forma previa;
Al
presentar el existir,
En
noble sacrificio;
Con
agrado debe marcharse,
En
palabra de verdad,
Hacia
sus señales de tiempo,
Donde
incinerado y sin malicia,
Camino
de retorno no habita,
Más
que la ardorosa oración;
Derrotado
en aflicción,
Sobre
tales pisadas;
Cómo
esperanzado,
He
de perseverar incauto;
Costumbre
desde hace mucho,
Sobre
la barra es aquel reloj,
Que
amenazando las 3:00 a.m.,
Entre
figuras de manos,
Murmura
la manera poderosa,
En
que su casa será taller;
Y
todos piezas sobrantes,
Le
honraremos en el subsuelo.
“Avivamiento
con raíces por cielorrasos”
Colocando
la ansiedad,
Cual
Dios solemne;
Ante
testigos alados,
Cornudos
ejecutamos sacramentos,
Lujuriosos
de exceso y hastío;
Hambre
que encarnan feligreses,
De
anestésicos y revelaciones,
De
extremos cercanos,
Con
límites distantes;
Jamás
deberá negarse,
Que
aquellos evangelios,
Fueron
narraciones alucinadas,
De
adúlteros principios,
A
calmo fin;
Epístola
a epístola,
Sin
dar tiempo a la duda,
Que
exonera los cuerpos,
De
fatales desenlaces súbitos;
Oh
Salvador,
Modelo
maestro,
De
nieve y níquel;
En
su atestiguar reside,
Vuestro
testimonio;
Almas
ungidas en siniestro,
Derivación
de abusos definitorios;
Oh
Salvador,
Entre
cal y arena,
Buscamos
luz en túneles,
Que
turbulentas paredes poseen,
Corriente
aérea,
De
ceniza clara,
Robusteciendo
las filas,
De
palmas que levantadas,
Alaban
vuestro nombre;
Dependientes
en una fe,
Que
apunta tú lumbre,
Siendo
el superlativo,
De
todos los hombres;
Venerado
hijo de virgen,
Que
inmortal y paciente,
Ayuno
es, eterno de luna,
Quedándose
corto en noche.
“Cupo
de inmundicia”
*Subtitulo:
Dispuesto
a quien necesite,
Colmado
en muecas,
Embriagado
repetía,
Refiriéndose
a un caso
En
particular;
Desconocido
para todos,
Al
generalizar el dilema,
Y
exponer la verdad.
Cuántos
accesos anales,
Debe
permitir un hombre,
Para
ser considerado
El
más sensual,
De
todos los homosexuales;
Cuántos
masajes de carrillos,
Debe
realizarse un sujeto,
Con
auténticas piezas
Balano-prepuciales;
Para
llamarse estricto y oral,
Devorando
con igual furia,
A
peones y amantes;
Cuántos
homicidios,
Mentiras
y sacrificios;
Cuántas
malas intenciones,
Crímenes
por omisión o acto;
Cuántos
ritos paganos,
En
maltratos consanguíneos,
Siendo
horror vil y cruel;
Cuántos
pecados,
Para
llegar a la gloria,
Del
perdón de mis perdones;
Ninguno,
Pues
desde ya,
Ostentan
aquel sello;
Y
desde antes de todo tiempo,
Pertenecientes
son,
A
rebaño especial.
“De
Cristo a Cristo”
*Subtitulo:
A
caso crees,
La
totalidad de esto;
Dijo
el acontecido,
Abriéndose
en la privacidad,
Permitida
por Judas.
No
preguntes a Dios,
Cosas
que sean de hombre,
Luego,
el creador siempre ha sido,
Y
existir no conoce,
Que
como ente le haga,
Símil
a los mortales;
Seres
de conductas y modales,
Que
miran con las apariencias,
Apuñalando
espaldas,
Con
largas lenguas,
Que
saben a sal,
Miel
y vinagre;
Lo
que sus palmas lamentan,
Haciendo
memorias de errores,
Que
visten de excusas,
Al
motivar la audición en reptiles;
No
cuestiones a Dios,
Por
instinto, pasión o lastima,
Si
por libertad se os ha enseñado,
Ser
dueños absolutos e irrefutables,
De
las risas y lágrimas propias,
Que
forman castigos y venganzas,
Dando
añoranzas por recompensa;
¿Oh
Cristo bendito,
Tienes
acaso, autónomo
albedrío?
Si
dudas de Tu respuesta,
Es
insinuarlo al Padre.
Fernando
García M.
*Datos de pista:
Tema: Involución rítmica 11.
Áutor/Interprete: Fernando Garcia M.
*Datos de pista:
Tema: Involución rítmica 11.
Áutor/Interprete: Fernando Garcia M.