“Un
corte de cabello”
(Implica
tal sin motivo)
Infinito
es el cielo,
Nada
se puede hacer,
Cual
vitrina de inalcanzables,
Profundo
se suele perder;
La
mañana ya se ha ido,
Suave
rocío toca el odio,
Que
manifiesto en esto de rostro,
Golpeado
por el viento húmedo;
La
canción se repite,
Podría
tomar menos olvido;
La
canción la repito, recordando,
No
anhelo saberme encontrado,
Por
tanto que la ciudad vive,
En
la respiración de los autos,
En
el andar de transeúntes pálidos,
Que
ignoran donde van con aceptación;
Abundan
nubes blancas y grises,
Cae
casi la noche como otras noches;
Quizás
haga esta vez más frio,
Afuera
que adentro, ajeno que propio;
No
imagino un día sin pena,
Que
igual pueda ser distinto;
Las
gotas son simples,
La
percepción del agotamiento,
Les
transmite señas de aires conocidos;
Locales
fallidos en inauguraciones huecas,
Sucumben
callados al mejor estilo,
Siendo
atravesados por sin el sentido,
De
adquisición, entretenimiento o esperanza;
Escasas
consiguen notarse,
Las
estrellas entre el firmamento;
Voces
hablan solitarias,
Narrando
pensamientos mudos;
Paradero
indefinido de pasos,
Agitan
pies como los míos;
El
cielo es infinito,
Antes
supe porqué lo digo;
Ahora
espero desaparición,
Disgustado
en intuiciones raídas,
Distraído
en frivolidades mal vendidas;
La
energía de aquel impulso,
Que
provoca espontanea risa,
Torcida
es como nunca lo ha sido;
Podría
ver más de lo que ya he visto,
Pero
implicaría caer más profundo,
Poseído
de temor funcional,
Postergado
al honor funeral,
De
marchar sin nada entre palmas,
Justo
como todos han partido.
Fernando
García M.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
versosysoledad.blogspot.com