“Sota de
triples”
(Acaecida
congoja)
Del mal aquel terrible,
Dónde estarás escondida,
Cura de los antojos;
De aquellas enfermedades,
Sí es que suena la vida,
En la peor de sus claves;
Soledad no vacua,
Es el ricillo de aquel cacho,
Que vino desde Israel;
Hablando a tres voces,
Libera ya tu plaga,
Embarga ya tus cuerpos;
Viajeras tales manzanas,
Clivadas en dulce amor,
Destruyen sus epitelios;
Sencillez no esquiva,
Es la extinción más refinada,
Cómo paga del pecado;
Allí
le ensalzas, allá el goza,
Allí le mientes, así acaba;
Teatrillo de epopeya torpe,
Falacia de aislamiento fronterizo,
Ascensión de incidencia nativa,
Donde siempre fueron decenas,
Para formar los miles.
Fernando García M.
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